Desde siempre hemos conocido las cocinas con las paredes revestidas de azulejos. No obstante, la pintura para cocina cada vez se está haciendo más popular. ¿Cuál es la mejor alternativa?
Ante todo, hay que recordar que esa es la estancia con mayor acumulación de humedad, debido a los humos que se generan. Pero también es aquel lugar con mayor riesgo de manchas: al cocinar es muy probable que salten gotas de alimentos sobre los muros.
Así que no sirve cualquier alternativa. En este artículo te contamos cómo decantarse por un método u otro.
Características de la pintura para cocina
Primero, es necesario aclarar que no todas las pinturas sirven. Es más, las únicas apropiadas son las denominadas “pinturas lavables”. En esa misma categoría, hay diferentes tipos: esmaltes al agua, esmaltes sintéticos, pinturas al aceite y pinturas plásticas. De todas ellas, la última citada es la indicada para cocina.
Entre otras cosas, es la ideal porque se pueden eliminar las manchas sin dejar rastro o cercos. Además, esta clase de pintura para cocina es muy resistente.
Si optas por esta elección, recomendamos forrar con azulejos únicamente el frontal de la cocina y zona de trabajo, ya que son las partes que más se ensucian.
Pros y contras de los azulejos
Como adelantábamos, los azulejos son la opción más sencilla de mantener limpia y desinfectada. Han demostrado ser una elección fiable a lo largo del tiempo.
No obstante, hay que reconocer que forrar toda la cocina de azulejos es más costoso (tanto en materiales como en mano de obra).
Igualmente, si eres inquieto y te gusta cambiar la decoración a menudo, quizá no sean de tu preferencia.
Ambas soluciones cuentan con ventajas y desventajas, según las preferencias de cada cliente. En Varmany estamos capacitados para ofrecer el servicio de pintura para cocina y colocación de azulejos.
Si deseas un presupuesto comparativo, contacta con nosotros.
